Feliz Día Internacional de la Mujer

Conmemoración del Día Internacional de la Mujer en la Superintendencia de Pensiones


        

Hoy se conmemora la acción de lucha y rebeldía de las mujeres, que con fuerza y determinación se organizaron para protestar por las míseras condiciones en que trabajaban y para exigir mejores condiciones laborales.

La historia nos cuenta que esta celebración comenzó a principios del siglo XX, y ayer leía que no se tiene completa certeza del evento que gatilló esta conmemoración, aunque ampliamente se le atribuye a las trabajadoras de la textil en nueva york, en 1908, que al realizar una huelga para exigir mejores condiciones laborales, resultaron brutalmente quemadas.

Pero lo cierto, lo importante aquí, es que se conmemora la fuerza y valentía de las mujeres que organizadamente fueron capaces de enfrentar el sistema que las oprimía. Me refiero por supuesto a la patronal que las explotaba, pero también al sistema patriarcal de la época que las subyugaba al hombre.

La historia, entonces, la ha escrito el hombre y no es sorpresa que en cada uno de los episodios de la humanidad, nos resulte machista.

Han sido muchas las que con valentía han dado incuso su vida por enfrentar no sólo la desigualdad de género, sino que también para enfrentar las desigualdades laborales que aun hoy persisten. En efecto, las mujeres han sido pieza clave en el juego de las relaciones laborales, a pesar que pocas veces han alcanzado protagonismo, siempre han estado impulsando transformaciones y motivando a las comunidades.

La misma historia se ha preocupado de invisibilizar este poder transformador de las mujeres, porque sabe que con ellas en el lugar que le corresponde, haría tambalear aún más este sistema patriarcal que hoy empieza a quebrarse. Ellas han sido el pilar fundamental del cambio social, laboral y político de este país, pero a lo largo de la historia han tenido que rascarse con sus propias uñas.

Más allá del plano laboral, pelear por los derechos de las mujeres no parece ser algo tan ambicioso. Hoy las mujeres piden algo tan simple como que se las respete en la calle, que reciban el mismo pago que el hombre, que no las acosen ni violen ni golpeen… que no las maten.

Tanta simpleza en la palabra, pero tan difícil que ha sido luchar contra la disparidad y la violencia de género en los hechos. Porque claro, la historia es machista y la incomodidad que genera el feminismo es la muestra perfecta de una sociedad incapaz de comprender el mundo con otros ojos.

A muchos les podría parecer que este día es una tontera, una conmemoración inútil, pero lo cierto es que la discriminación y la desigualdad son temas reales que existen en Chile. Para las mujeres que día a día son violentadas, es un problema tan real que duele.

Sin ir más lejos, la mujer se siente violentada en la salud, en la seguridad social y en el trabajo. Castigada por el maravilloso don de la vida y por sus amplias expectativas de vida. Es abusada laboralmente pues sólo el 47% de ellas tiene un trabajo formal. Es vulnerada por el Estado que le impide decidir sobre su propio cuerpo. Vale hacer la reflexión, entonces, de cómo esta Superintendencia de Pensiones promueve un cambio en la dirección opuesta, es decir, en el camino que busca eliminar la desigualdad que enfrenta la mujer.

Hoy la mujer le ha dado alma, color y pluralidad a las cosas que venía haciendo el hombre, ha llenado con su pasión cada hoja de la historia de la humanidad.

Hagámonos cargo y permitamos que el futuro sea alentador y pleno de derechos para aquellas que son nuestras madres, hijas, hermanas y esposas. Porque la sangre de esas mujeres que empezaron la lucha contra las desigualdades de todo tipo no puede terminar en un femicidio ni en un trabajador que es explotado por el patrón. Necesitamos de su poder transformador para seguir cambiando Chile. Conmemoremos hoy años de lucha para que no se nos olvide NUNCA que la historia también le ha pertenecido a las mujeres.

Por: DIRECTIVA NACIONAL

Superintendencia de Pensiones    ANEF    CUT    AFUMINVU